Tecnólogas del siglo XXI: Carlota Cañamero

Carlota Cañamero Herrero

La medicina es un campo dependiente de la tecnología para mejorar la atención y cuidados de los pacientes, acelerar los tiempos de diagnóstico y la precisión de las pruebas. Eso lo sabe nuestra compañera Carlota Cañamero Herrero (Nigrán) que realiza las prácticas del grado de Telecomunicaciones en el área eHealth de Gradiant y que protagoniza nuestro Tecnólogas del siglo XXI. Desde pequeña tenía claro que su vocación estaba orientada al trato con otra gente y por eso trabaja en el desarrollo de sistemas de apoyo a la decisión clínica basados en IA. Es una apasionada de la naturaleza y de los animales, por eso en sus ratos libres aprovecha para montar a caballo y practicar ciclismo, deporte en el que compitió durante años. Carlota tiene espíritu aventurero, fascinada por Indiana Jones quiso ser arqueóloga; ahora, aún conserva esa espontaneidad y dice que “se apunta a un bombardeo, el plan no importa, siempre con amigos, eso sí”.

 

¿A qué querías dedicarte cuando eras pequeña? 

Nunca tuve una profesión en mente. De pequeña quieres ser aquello que ves y te alucina. Recuerdo que después de ver Indiana Jones, quería ser arqueóloga…

 

¿Por qué elegiste la tecnología? 

Un año quería hacer medicina deportiva, al otro quería estudiar el cerebro humano y por último quería hacer etología. Nunca tuve claro a qué quería dedicarme pero siempre lo orientaba inconscientemente a profesiones donde se trata de primera mano con personas. Me sentía más cómoda ahí. 

Las matemáticas se me daban bien y en bachillerato cursé la asignatura de TIC con un profesor excepcional, que despertó mi interés por el mundo de la tecnología. Pude investigar todas sus aplicaciones prácticas: poder proporcionar soluciones más sencillas a situaciones complejas, es lo que me ayudó a decidirme.

 

¿Dónde te planteaste hacer la carrera? ¿Por qué? 

Desde un principio quise estudiar la carrera en la Universidad de Vigo, por la cercanía a casa.

 

¿En qué estás trabajando actualmente? 

Formo parte del equipo de eHealth de Gradiant, donde se desarrollan tecnologías que, aplicadas al sector, permiten alcanzar el objetivo: la mejora de la calidad de vida de las personas en el ámbito de la salud.

Actualmente, colaboro en el desarrollo de una aplicación basada en IA que evalúa las heridas crónicas, como úlceras por presión o pie diabético y recomienda un tratamiento de manera mucho más ágil y rápida.

 

¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo? 

Lo que más me gusta de mi trabajo es que tiene un impacto directo sobre las personas, mejorando o facilitando su vida diaria. Esto hace que sienta que mi trabajo es útil, práctico y valioso.

 

¿Quién es tu referente femenino en el mundo de la tecnología? 

Existir, existen pero la verdad es que no tengo definida una única referente. Tanto en la Escuela de Telecomunicaciones como en mis redes laborales y sociales, tengo la suerte de tratar con mujeres muy relevantes en el ámbito STEAM e intento absorber y aprender de cada una de ellas.

 

¿Cómo imagináis vuestra carrera en el ámbito tecnológico? ¿A dónde os gustaría llegar? 

Vivimos en una etapa marcada por la evolución de la tecnología y como profesionales debemos adaptarnos mediante formación continua. Me imagino entonces una carrera “de fondo” donde nunca termine de aprender. Me gustaría orientarme a la gestión de proyectos en el futuro. Mi objetivo es llegar a ser una profesional única.

 

¿Qué le dirías a l@s tecnólog@s del futuro?

Les diría que no se pusieran límites. Académicamente hablando, muchas veces no optamos por nuestra primera elección porque se trata de un camino muy difícil que solo los “más listos” o “frikis” lo consiguen, incluso  que se trata de una carrera “de chicos”. Yo les animaría a desmitificar todas estas carreras: con constancia y trabajo se llega a todos lados.