Los sistemas de Historia Clínica Electrónica (HCE) son los sistemas informáticos que permiten a los médicos acceder a la información clínica de los pacientes, tales como sus antecedentes, medicación o ingresos, por ejemplo. Los primeros surgieron en Estados Unidos en los años 60, pero no fue hasta los 90 cuando empezaron a probarse en España. Su introducción en los distintos servicios sanitarios trajo grandes ventajas, entre las que destacan una mejor asistencia e importantes ahorros de tiempo.
Situación actual
Para que los sistemas de HCE puedan contar con la información del paciente de forma centralizada, es necesario que los médicos la introduzcan previamente. Para ello, han de mecanografiar esta información en el sistema, lo que genera importantes cargas de trabajo a los profesionales, adicionales a su labor asistencial. La American Medical Association ha publicado recientemente un estudio que revela que los médicos de atención primaria pasan más de la mitad de su jornada laboral, casi 6 horas, interactuando con los sistemas de información hospitalarios durante y después de las horas de la práctica clínica.
Con toda esta información extraída del paciente, tanto la recopilada por ellos mismos como por otros compañeros, además de los resultados de las distintas pruebas, se espera que los médicos puedan llegar a un diagnóstico, aunque este es un proceso complejo en el que pueden producirse errores. Algunos estudios hablan de una incidencia de entre el 5% y el 15%, afirmando incluso que uno de cada veinte estadounidenses adultos se verá afectado por un diagnóstico incorrecto.
Se ha demostrado que los sistemas de apoyo a la decisión clínica son efectivos para mejorar la calidad asistencial y reducir errores, pero nuevamente la forma de introducir la información en la HCE supone una gran limitación para los profesionales médicos: al encontrarse en texto, ya que estos sistemas no son capaces de entenderla sin un procesado previo de codificación.
Así, encontramos en las HCE sistemas muy útiles, pero que se ven lastrados por la forma en la que los profesionales interactúan con ellos. Por un lado, el registro de los datos consume demasiado tiempo, además de ser un proceso tedioso, repetitivo y susceptible de incluir errores. Por otro, el resultado de las HCE es texto heterogéneo y de difícil utilización por otros sistemas.
La solución que mejora la experiencia y ahorra tiempo
Desde Gradiant queremos impulsar la innovación a través de las TIC para ofrecer soluciones avanzadas que mejoren la calidad del servicio ofrecido a los pacientes. Nuestro objetivo es cambiar la forma en la que los médicos interactúan con los sistemas de HCE para hacerla más eficiente, rápida y obtener mejores resultados.
Para ello, utilizamos distintas tecnologías innovadoras para crear una plataforma web que pueda integrarse con las HCE existentes, dotándolas de nuevas capacidades. La plataforma, bautizada con el nombre de DANA (Digital ANAmnesis) y desarrollada en colaboración con la Fundación Biomédica Galicia Sur y el Sergas, con la colaboración del doctor Ismael Said, cuenta con las siguientes características.
Interfaces de usuario
Muchos de los sistemas de HCE tienen poca usabilidad, ya que es complicado desarrollar interfaces efectivas y funcionales preparadas para múltiples dispositivos. Además, el método que emplean los médicos para introducir la información actualmente -a través de la mecanografía- acarrea muchos problemas. Para solventarlos, en algunos casos se complementa con el uso de desplegables,seleccionables y plantillas, pero estos métodos limitan la flexibilidad y, por tanto, la usabilidad.
DANA aplica los principios de diseño de IU (Interfaces de usuario) durante el desarrollo, para lograr una interfaz que minimice el mecanografiado aprovechando el potencial de los dispositivos táctiles. Para ello, se utilizan frameworks modernos que permiten el desarrollo de IU potentes y multidispositivo como Angular y Material Design.
Co-creación y metodologías ágiles
Para conseguir interfaces como las anteriormente expuestas, es fundamental involucrar a los usuarios finales en el proceso de diseño y desarrollo. DANA utiliza principios y marcos de co-creación, con metodologías ágiles como Scrum, marcando iteraciones cortas en las que poder recibir una validación continua de los desarrollos realizados, y así adecuarlos al máximo a las necesidades reales.
Además, en las fases iniciales de esta solución se han utilizado plataformas como Firebase y Cloud Firestore que permiten patrones serverless con los que acelerar al máximo la obtención de productos sobre los que obtener validación, probarlos y repetir una y otra vez con el fin de conseguir cada vez un mejor resultado.
Reconocimiento por voz
Para contribuir en la mejora de la interacción con el sistema,el software de reconocimiento de voz ofrece una alternativa viable a la engorrosa interfaz de los HCE. Contar con asistentes activados por voz permite reducir en gran medida el tiempo requerido para introducir información.
Se han realizado pruebas con plataformas como DialogFlow y la API Web Speech que permiten a DANA contar con una interfaz conversacional basada en voz, sustituyendo así el tedioso mecanografiado u otras interfaces.
Interoperabilidad
Para que DANA resulte realmente útil, debe integrarse con los distintos sistemas de HCE. Estos sistemas son muy heterogéneos, dificultando el intercambio de información entre ellos.
Nuestra solución se está implementado de acuerdo a la especificación SMART on FHIR, que define un conjunto de protocolos de código abierto que permite a las aplicaciones ejecutarse sin problema y de forma segura en este tipo de sistemas. Por otro lado, y para poder hacer que los datos obtenidos (síntomas y signos del paciente) sean utilizados directamente por otros sistemas, se codifican empleando la terminología estándar SNOMED-CT.
Recomendaciones
Con el objetivo de minimizar los errores durante la recopilación de información del paciente, DANA incorpora la función de recomendar síntomas y signos durante la realización de la anamnesis y la exploración física. El principal reto que supone esta función es el gran volumen de posibilidades existentes. SNOMED, por ejemplo, define más de 88000 síntomas distintos, a lo que habría que añadir todas las posibles combinaciones.
En DANA se está probando un enfoque basado en filtros colaborativos para superar estas dificultades. Partimos de la idea de que un conjunto de síntomas y/o signos que han sido seleccionados de manera conjunta en el pasado, probablemente vayan a coincidir en el futuro. El sistema aprende estas relaciones y extrae conclusiones que el médico recibe como sugerencias de síntomas, signos….Gracias a este enfoque, es posible aprovechar el conocimiento proporcionado por los usuarios de forma colaborativa. Además, puesto que el sistema aprende con el uso, no es necesaria una gran base de conocimiento para poner en marcha el sistema.
Por qué elegir DANA
DANA mejora la forma en la que los médicos interactúan con los sistemas de HCE, para que esta sea más eficiente y rápida. Con esta solución, los profesionales sanitarios dispondrán de más tiempo para atender a sus pacientes, mejorando la calidad de la atención proporcionada. Para los pacientes, DANA mejora la seguridad y la calidad asistencial, gracias a la estandarización en la recogida de los datos. Y los gestores podrán emplear DANA para predecir epidemias y actual frente a la variabilidad de la práctica clínica, ya que DANA permite la explotación de los datos derivados del uso de la herramienta, aumentando así la eficiencia y disminuyendo el tiempo en la confección de la historia clínica.
Autor: Luis Manuel Morán Hermida, desarrollador senior en el área de eSalud de Gradiant