Mujeres tecnólogas: Maryam Mirzajani
Hoy os hablamos la tecnóloga que demostró que la perseverancia es la clave del triunfo, y que no siempre es necesario mucho tiempo para alcanzar del éxito. Es considerada una de las mujeres más relevantes en el mundo de las matemáticas de los últimos años, y el rector de la universidad en la que ejerció como profesora la definía cómo:
“Una brillante teórica y también una persona humilde que aceptó honores solo en la esperanza de que podrían animar a otros a seguir su camino. Su contribución como académica y como modelo de motivación es significativa y duradera”.
¿Quién fue Maryam Mirzajani?
Maryam Mirzajani fue matemática y profesora de matemáticas en la Universidad de Stanford. Aunque si por algo destaca realmente es por haber sido la primera en ganar una Medalla Fields –equivalente al Nobel en matemáticas- y por ser la primera estudiante iraní en triunfar en el mundo de las Olimpiadas Internacionales de Matemáticas de Hong Kong y Canadá, donde ganó varias medallas.
Apuntes biográficos
El inicio de su corta vida tuvo lugar en Teherán, en mayo del 1977. Escogió para su formación la Universidad de Tecnología Sharif, situada en su ciudad natal, donde se graduó a los 22 años.
Sus éxitos en el mundo de la ciencia parecían no tener fin, y es que la joven ganó el Premio Blumenthal de la American Mathematical Society en 2009, el Ruth Little Satter –que galardonaba el trabajo de las mujeres de la ciencia- cuatro años después y la Medalla Fields a los pocos meses.
Todo esto hizo de Maryam Mirzajani la primera mujer en lograr la máxima distinción en el mundo de las matemáticas, pero la realidad de su mundo truncó ese feliz momento cuando le detectaron un cáncer de mama a los 36 años.
La matemática era una mujer perseverante y tenaz, y fue esto lo que la hizo llegar tan lejos en el mundo en el que trabajaba y lo que le dio la fuerza necesaria para luchar durante tres años. Lamentablemente, el 15 de julio de 2017 la matemática fallecía en Estados Unidos.
Legado en el sector tecnológico
Asombró a la audiencia con su estudio sobre un problema referido a la trayectoria de las bolas de billar en una mesa poligonal y logró grandes avances en las superficies de Riemann y los espacios de Moduli.
Además, sus estudios supusieron una fuerte contribución para el estudio de los números primos y la criptografía, así como para la resolución de los interrogantes que se centran en el estudio de los orígenes del universo.